febrero 27, 2012

Entró casi sin hacer ruido.  Con cada paso que sus pies se atrevían a dar, dirigía la mirada a casa uno de los rincones de la estancia: el sofá destartalado, la vieja ventana, los papeles tirados por el suelo, las cajas por desembalar...
- ¿Qué hay tras esa puerta? -preguntó inquietado, señalando un trozo de madera desgastado por el tiempo que apenas cubría el acceso a otra habitación.
- El cuarto oscuro -sonrió levemente mientras lo decía.
Joe se sentó en el sofá y se quitó la camisa. Al fin y al cabo, sabía a lo que iba. Robert cogió un cigarrillo y se lo encendió. Disfrutó de una lenta calada mientras veía cómo los músculos de Joe se iban tensando y el ambiente se iba cargando de esa sensación que le recorría el cuerpo cada vez que lo hacía.
- Quítate los pantalones -le pidió a su invitado.
Joe accedió. Robert lo miraba atentamente, con ese toque de voyeur que tan famoso le había hecho. Pegó otra calada al cigarro. Joe ya estaba totalmente desnudo.
- Vamos allá, pues.
Robert cogió la cámara y empezó a hacerle fotos. En eso, era incluso mejor que en el sexo.

* * * * *
He came in without making any noise. With each step his foot allowed him to make, he looked at every corner in the room: the shabby sofa, the old window, papers left on the floor, boxes waiting to be opened…
- What’s behind that door? –he asked uncomfortably, pointing at a piece of worn out wood which almost covered the entrance to another room.
- Just the back room –he smiled slightly as he said it.
Joe sat on the sofa and took his shirt off. After all, he knew what he was doing there. Robert took a cigarette and lighted it. He enjoyed a slow drag as he watched Joe’s muscles tensing and noticed how the environment was being loaded with that feeling he liked so much. He used to feel that way every time.
- Take off your trousers –he asked his guest for it.
Joe agreed. Robert was looking at him thoughtfully, with that voyeur touch that had made him so famous. He took another drag from his cigarette. Joe was already naked.
- So, let’s go.
Robert took the camera and started taking pictures. In that, he was even better than in sex.

Fragmento literario escrito por Daboy22 basado en la obra de Robert Mapplethorpe
Literary excerpt written by Daboy22 based in Robert Mapplethorpe's work



























































DB22

febrero 23, 2012

Hace algún tiempo que estoy leyendo por algunos blogs y portales de Internet que el lobby gay, algo así como PRISA con Zapatero como bien explicó Marisa en Aquí no hay quien viva, está penetrando –qué bonita palabra, ¿eh?– en los organismos internacionales con el fin de perpetrar una conspiración a nivel mundial y dominar las altas esferas. ¡Ahí es nada! La verdad es que siempre que leía semejantes noticias –si se las puede llamar así– no podía hacer nada más que reírme. Y me reía mucho y bien, como suelen decir algunos. Sin embargo, algo ha cambiado. Ya no me río. La razón por la que mis carcajadas se han extinguido la tienen unos documentos que me he encontrado por la calle y que, muy a mi pesar, confirman algo terrible: lo de la conspiración gay es verdad. Amigos, hemos sido engañados. He decidido compartir dichos documentos para que juzguéis vosotros mismos y abráis los ojos. A lo Amenábar.

INFORME GAY THE PLANET Nº 676837
En el presente informe tan confidencial como los de Apple, que se supone que la ciudadanía no los debe conocer pero luego siempre se dejan tirados en un Starbucks, se expone una propuesta de constitución con los cambios que haremos nosotros, el lobby gay, en adelante “los divinos”, para mejorar el planeta y crear un mundo tan superfabu que hasta los marcianos de Putón quieran invadirnos.

Punto número 1: Estado. Bandera e Himno.
Me presento para Ministro de Cultura,
¿cuento con tu voto?
Se eliminan todas las repúblicas y se instaura la monarquía unipersonal en alternancia como único modelo de representación estatal. Con esta medida, cada ciudadano podrá ser reinona por un día. Además, será necesario pintar la Casa Blanca y los diferentes palacios de rosa, ya que el blanco es el color de la temporada pasada y desde Milán nos aconsejan que hay que darle una mano de pintura al edificio. La bandera sigue siendo la arcoiris y el himno “I will survive”, de Gloria Gaynor.

Punto 2: Separación de poderes y Justicia
Se establece la separación de poderes. El legislativo llevará las riendas, el ejecutivo se dejará hacer y el judicial se pondrá palote viendo cómo se lo montan entre la Cámara Alta y la Cámara Baja. Los fiscales serán tan buenorros que los delincuentes no tendrán más opción que entregarse. Los encarcelados tendrán la obligación de participar en películas porno educativas estatales, bien como actores bien en la parte de producción, que se proyectarán en los centros educativos de los distintos países.

Punto número 3: Educación
La asignatura Educación Constitucional –antigua Educación para la ciudadanía– será suprimida y, en su lugar, se impartirá Educación para el buen homosexual, cuyo curriculum comprenderá los temas de cómo hacer bien el sexo oral, quién diablos es Boris Izaguirre y por qué el marrón no puede ser nunca el color de la temporada por mucho que se empeñen cuatro diseñadores.

Miembros del Equipo Nacional
Punto número 4: Economía y Hacienda.
Rebajas permanentes. No hace falta decir más.

Punto número 5: Cultura y Mariconeo
La entrada a todos los edificios culturales –léase museos, bibliotecas, galerías, discotecas y saunas– del estado será gratuita y se repartirán condones en el puesto de información. Se instauran los Nobel del mariconeo, con premios canjeables en ropita o cheque regalo del Leroy Merlin. El ministro de cultura estará de “toma pan y moja que no has mojado todavía” y se le otorgará el título de Señor Chulazo.

Punto número 6: Deportes
Se mantendrán todos los deportes y todos los campeonatos existentes con la obligación de los deportistas de quitarse las camisetas al finalizar los partidos. En el caso de natación, waterpolo y similares, se las tendrán que poner. Por joder.

Punto número 7: Comunicación e Información
Las revistas de corazón tendrán que ser como Interviú y sacar en portada a una tía buena en bolas por imperativo legal. ¡Bollos, esta ley está pensada para vosotras! ¡Que también tenéis derecho a disfrutar, qué cojones!

¡Todas juntas a rezaaaaaaar!
Punto número 8: Vida Política
Para acceder a la política deberéis ser jodidamente guapos y guapas. Además, no sólo no tendréis que ir al Congreso con corbata sino que deberéis asistir en ropa interior. Si os vamos a pagar el sueldo entre todos y no vais a hacer nada, por lo menos alegrarnos la vista. Además, habrán referéndums permanentemente por Internet, para cuestiones serias como qué se tiene que poner la Milá en la próxima gala de Gran Hermano.

Punto número 9: Diversidad e Igualdad
No habrá discriminación de ninguna clase. Los contenidos heterosexuales también serán tratados en la educación y promoveremos una ley de registro civil heterosexual para aquellos que quieran arrejuntarse.

Punto número 10: Religión
El planeta será un estado confesional, bajo la Nancyreligión. Como dicen las Nancys, será pecado no llevar tacón y el maquillaje será una obligación. Ea. Pero sólo en domingo

Firmado:
Los divinos


Ahora ya podéis opinar. ¡El lobby gay acabará dominándonos a todos! (Aunque a algunos, seguro que les gusta la idea, viciosillos…)

DB22

febrero 21, 2012

"Tiene derecho a permanecer hetero. Cualquier cosa que diga puede ser utilizada para demostrar su heterosexualidad. Tiene derecho a una pareja del sexo opuesto. Si no puede conseguir una pareja del sexo opuesto, los portales como Meetic, eDarling, su familia y la iglesia le facilitarán la tarea de conseguir una..."

"Tiene derecho a venir a mi despacho,
quitarme la ropa y follarme salvajemente"
A veces, cuando me paro a pensar en las implicaciones de ser gay, me da rabia el hecho de tener que dejar claro que eres homosexual si no quieres que te estén preguntando constantemente "¿y ya te has echado novia?". Y es que ser gay sigue siendo la excepción que confirma la regla, una desviación de los cánones normales que transcurren por territorios heterosexuales. Lo normal es que crezcas, seas un playboy, ligues con mil tías, te eches novia formal cuando se te ocurra sentar la cabeza, te cases -por la iglesia, que le hace mucha ilusión a la tía Antonia-, te vayas de luna de miel, folles como un cosaco, dejes preñada a la parienta, tengas hijos, eduques a tus hijos, no puedas con tus hijos, esperes que tus hijos sean unos playboys... El ciclo de la vida, vamos. Sin embargo, nadie espera que seas maricón. O bollera, que es la versión femenina pero con las mismas implicaciones. Porque eso significa que algo ha ido mal, que no ha salido como estaba planeado.

Siempre se repite la misma historia (y ya no puedo más, cantaba el Camilo Sesto). Los familiares, los amigos, los conocidos... Al principio te hace gracia -pobres ignorantes, piensas tú mientras sonríes recordando que el último que tuviste entre tus brazos no se llamaba precisamente Noelia-, pero después, ya cansa. E indigna. Porque los heterosexuales no tienen que ir por ahí dejando claro en todo momento que lo son. Se les presupone. Tú, si no dices nada, también eres heterosexual. Por defecto (que dirían los programadores informáticos). Pero si dices algo para dejar claro que te gusta más un hombre que a un tonto un lápiz, sabes que te expones a varias reacciones. Buenas, malas o de esas que te apetece callar con un zas en toda la boca, pero siempre hay reacciones. Seguidas de preguntas, además: ¿desde cuándo? ¿por qué? ¿estás seguro? ¿pero has probado con una tía?

Como yo ya me estoy cansando del tema, me he preparado una respuesta para cuando me vuelvan a preguntar lo de la novia. Una respuesta para quedarme con el personal y para reírme, aunque sea en mi interior, de la situación y demostrar, al mismo tiempo, que la homosexualidad es tan normal como la heterosexualidad. ¿Tienes ya novia? -me preguntarán. Y yo contestaré: ¿Conoces, por citar algún ejemplo, a Pierre et Gilles, Robert Mapplethorpe, Gus Van Sant, Jean Marais, Paul Morrisey, Pier Paolo Pasolini, Anthony Perkins, Rupert Everett, Alejandro Amenábar, Andy Warhol, Francis Bacon, David Hockney, Allen Ginsberg, John Maynard Keynes, W. H. Auden, Thomas Mann, Oscar Wilde, Jean Cocteau, Michel Focault, Edmund White, Stephen Fry, Freddy Mercury, Elton John, George Michael, Gianni Versace, Jean Paul Gaultier o Brian Kinney? ¿Sí? Pues yo igual de gay que ellos.

DB22

febrero 17, 2012

Señor Louie Gohmert;

Me dirijo a usted a raíz de las declaraciones que ha hecho en las que dice que el matrimonio igualitario falta el respeto al espermatozoide y al óvulo. Espero que estas líneas sean de su agrado y le ayuden a comprender nuestro mundo, el de los espermatozoides.

Desde que tengo uso de razón, y he sido uno de los espermatozoides más listos de mi quinta, he crecido con la idea de que uno vive para buscar a su óvulo perfecto. Así nos entrenaron, con esa ideología, durante intensas jornadas de actividades forzosas -y al parecer, placenteras-, en las que no podía evitar ver cómo muchos de mis compañeros se iban para no volver jamás. Pánico corría por el lugar cada vez que la temperatura subía -y no era lo único que se izaba- y se nos informaba que el sujeto en el que vivíamos había conseguido quedarse sólo en casa y estaba a punto de ver un vídeo de Falcon Studios, que vaya usted a saber qué diantres es eso. El caso es que cada vez que ocurría, por los informes que manejamos podemos aventurarnos a decir que solía ser de noche, millones de nuestros camaradas se iban en búsqueda de un óvulo que nunca encontrarían. Y así, durante largos años de adolescencia. ¿Quién rinde homenaje a los espermatozoides caídos en batalla de esta manera? Nadie se atreve a alzar un cenotafio conmemorativo. Aquí se levantan muchas cosas, pero de respeto encontramos muy poco. Prosigamos.

Momentos antes de perder
a compañeros espermatozoides
Los oscuros tiempos que llamamos como periodo negro o adolescente -por lo "dolescente" de la situación que se repetía a menudo- dieron lugar a una época más sosegada, llamada juventud. Es en esta época en la que las jornadas informativas y las charlas educativas se sucedían con mayor regularidad. Yo mismo incluso acudí a varios congresos, como "hacer feliz a un óvulo es fácil si sabes cómo" y "ovulo 3.0. El futuro ovulístico en tus manos". Sin embargo un día, el pater spermatozoidus, el chamán de la tribu, el líder de la manada, el sargento de nuestros días (creo que ya queda claro que era el espermatozoide que manejaba el cotarro) nos dijo, con mucho pesar, que nosotros no íbamos a encontrar un óvulo. Nunca. Muchos de mis compañeros no soportaron la noticia, deseaban suicidarse y provocaban alzamientos populares para salir al exterior lo antes posible y así dejar de ser espermatozoides vivitos y coleando. Pero nos tocaba ser fuertes y asumirlo. Después de todo, como decía una cantante llamada Lana, monárquica como ella sola, que últimamente escuchábamos bastante en el campamento, we were born to die.

Pero todo cambió. Llegó un día en el que descubrimos que realmente, no todos los espermatozoides habíamos sido engendrados para buscar un óvulo. Que era cruel la intensa batalla que librábamos nosotros y nuestros hermanos por conseguir alcanzar un óvulo que, a veces, incluso nos ninguneaba. Empezamos a escuchar canciones como "I will survive", empezamos a hacernos fans del spermbook de Donna Summer y a salir por el ambiente cada fin de semana. Nos dimos cuenta de que nuestro destino era el mismo que aquellos que buscaban un óvulo, pero visto desde un ángulo diferente. Aprendimos a vestir mejor y dominamos todas las tonalidades de blanco como si nuestro mentor hubiera sido Jasper Jones. Éramos espermatozoides a la última. Y los demás nos envidiaban, nos temían, nos repudiaban, aunque nosotros no sabíamos por qué. ¿Quién respetaba entonces nuestras decisiones? 



Causantes de muchas bajas en combate
Descubrimos que muchos óvulos de los que nos ninguneaban lo hacían porque nosotros, los espermis, no les atraíamos nada. Querían estar con otros óvulos. Rollo bollóvulo. ¡Qué genial! No estábamos sólos. Incluso uno de los espermas de nuestro grupo de amigos, el Josua, nos confesó que él se sentía MariJose. ¿Y qué hicimos nosotros? ¡Apoyarle, faltaría más! Poco a poco descubrimos que de nada de respeto, sino más bien de mentira. Habíamos vivido en una gran mentira que nos inculcaba una sola y única visión de un mundo complejo y plural. 

Volviendo a lo que nos ocupa, señor Louie Gohmert, se cree usted que es el abanderado para defender nuestro respeto. Deje de defendernos y apóyenos. Apoye el derecho de todo espermatozoide y óvulo a hacer lo que quiera. A todo tío y tía (los recipientes en los que nos encontramos) a disfrutar del sexo con quien quiera y a vivir su vida feliz. El día en el que ustedes nos respeten como deben, ese día será uno de los más felices de nuestras vidas. Y aunque en ello nos vaya la vida, lo celebraremos con una gran corrida. Aunque sea la última cosa que hagamos. Pero la habremos hecho de forma consciente y feliz. 

Atentamente
Un espermatozoide maricón.

P.S. Ahora somos tan felices que hasta protagonizamos carteles de películas aclamadas por la crítica cinematográfica. ¡Toma que toma que tomatá!

DB22

febrero 15, 2012

Hará unos años que me di cuenta de que era gay, una revelación que fue algo sorprendente para mí. Con el tiempo, empecé a percibir ciertos indicios: me gustaba el arte, entendía de moda, me sabía todas las canciones de Madonna y me ponía burrote viendo al buenorro que aparecía en los anuncios de Abercrombie & Fitch, siendo éste último un síntoma claro de mariconismo. Así que, aceptada mi nueva condición homosexual -y entendiendo de una vez por todas por qué la Elsa Pataky no me producía la más mínima excitación mientras mis compañeros de pupitre se comportaban como monos cada vez que hablaban de ella- empecé a indagar en el maravilloso mundo gay, lleno de color -o al menos, de los seis necesarios que aparecen en nuestra bandera.

Cuando empecé a decirle al mundo que era gay -o que me follaba a tíos, que era lo que escuchaba la mayoría cuando les hablaba-, empecé también a darme cuenta de la cantidad de prejuicios y estereotipos a los que nos vemos sometidos diariamente, tanto interna como externamente. Desde si nos puede gustar el fútbol a si podemos ser seguidores de bandas de heavy metal. Desde si podemos ir en chándal por la calle a si tenemos que salir sólo por el ambiente. Desde si los gays pensamos sólo en el sexo a si debemos renunciar al matrimonio. Desde si debemos o no hablar en femenino. Desde si...

El hecho es que, tanto ahora como desde hace unos cuantos años, periodo al que me he permitido el lujo de llamar "postadolescencia", me estoy dando cuenta de que hay muchas voces y muchas opiniones respecto a todos los temas. En lo cultural y en lo social. Incluso en lo político: gays de derechas, gays de izquierdas. Por ello, surge este blog, para que haya una voz más.

Si quieres te lo explico forma parte de este proyecto de investigación que estoy desarrollando a nivel personal y en el que también os voy a pedir que me expliquéis todo lo que queráis. En las entradas que iré posteando en este blog intentaré tratar temas de todo tipo y hablaré sin tapujos ni eufemismos de lo que me venga en gana. Tenéis toda la libertad de apoyar o criticar mis opiniones, a través de los comentarios -que espero que sean muchos. También tenéis toda la libertad de proponer temas nuevos a través del email o de los comentarios (again!). Se abrirán encuestas (la primera ya la podéis encontrar a la derecha) y se pasarán links y todo aquello que vaya encontrando y que crea que es interesante.

Y hasta aquí la introducción del blog. Muy pronto, publicaré la verdadera primera entrada. Tengo tantas cosas que contar, como LODVG, que todavía no sé muy bien por dónde empezar. Empezaremos, supongo por el principio. Y mientas el principio llega...

DB22